Hace un par de semanas tuve un sueño raro. Bueno, todos los sueños me parecen raros, a decir verdad. Y es que el significado de los sueños es algo confuso para mí. Algo que siempre me ha dado curiosidad pero que nunca intenté descifrar más allá de una consulta en Google. Sí, así es cómo solía sacarme las dudas. Ya sé, no es muy profesional esto pero leía algo interesante y me quedaba tranquila. Hasta hace poco, que decidí compartir mi sueño con mi terapeuta.
La interpretación de los sueños es una práctica que planteó el médico y neurólogo austriaco Sigmund Freud para hacer conscientes los pensamientos del inconsciente. Digamos que nuestro inconsciente nos habla a través de los sueños. A veces, olvidamos todo al despertar. Otras, recordamos algo en ese instante pero luego se nos va. Por eso, a mí me solía gustar contar los sueños antes de que entrara luz en la habitación, pero claro, tampoco puedo despertar a mi compañero cada día. Así que decidí anotarlos. Lo hice un tiempo y después se me olvidó. Ahora, mi objetivo es retomar esa práctica para poder sacarle partido a mi inconsciente.
¿Para qué interpretar los sueños?
Seguramente te has despertado alguna vez habiendo soñado que llegas en pijama a la escuela, o que se te caen todos los dientes o que quieres correr y no puedes, y te has preguntado ¿Qué significa esto? Yo siempre he asociado mis sueños a miedos. En el caso del pijama pensaba que tenía que ver con ese miedo a que se rieran de mí por ir en pijama. Quizá no iba tan desencaminada, porque los sueños se relacionan con emociones, deseos y recuerdos.
El inconsciente tiene muchas formas de decirnos algo y utiliza elementos que hemos visto u oído durante el día o la semana y los mezcla para formar un relato. Interpretar el significado de los sueños nos ayuda a tomar consciencia de una situación que nos preocupa. Puede ser un miedo pero también algo que deseamos.
Interpretando mi sueño
Como decía al comienzo, hace poco soñé que estaba en una cafetería de Madrid tomando un café con una amiga. Esa amiga me conocía bien y en el sueño supuse que era mi amiga italiana que vive en Londres, porque no recuerdo haberla mirado a la cara. Más bien, como que yo veía la conversación de cerca y me veía a mí pero no era yo del todo. Era raro pero físicamente no era yo (tenía el pelo rojizo y con rizos perfectos). Por momentos sentía que esa era una amiga y por momentos que era yo. La cosa es que no recuerdo mucho de este sueño más que el hecho de que a esta falsa “yo” le daba un aneurisma, o al menos eso es lo que decía mi amiga: “Te está dando un aneurisma”. Lo decía justo después de que la yo diferente empezara a decir algo con f y no lo consiguiera.
Existe una técnica psicológica que permite interpretar el significado de los sueños, según Freud. En su libro «La interpretación de los sueños” dice que si se aplica este procedimiento, todo sueño aparece como un producto psíquico provisto de sentido. Habla de “tentativas del inconsciente para resolver un conflicto de alguna clase, ya sea algo reciente o algo procedente de lo más hondo del pasado”.

Entonces ¿Cuál es el significado de los sueños?
Si bien recomiendo ayudarse de una terapeuta especializada, una persona que entienda de psicoanálisis, podemos aventurarnos a interpretar nuestros sueños y descubrir su significado. Sigo pensando que no es tarea fácil. No solo porque a veces olvidamos detalles o los confundimos, sino porque la información nos llega del inconsciente de una forma alterada. No todo es lo que parece ser.
Tras comenzar a analizar mi sueño con mi psicóloga, me di cuenta que esa yo que no era yo, en realidad era una nueva yo. Esto tiene que ver con mis deseos. Hace tiempo que estoy buscando mi identidad, que creía haber perdido tras la segunda maternidad. Si es que la había encontrado tras la primera, no estoy yo tan segura. Cuando comencé a estudiar y practicar el coaching emocional en 2019, aprendí mucho sobre psicología y sobre la mente.
Desde entonces, y sobre todo desde que me analizo, me metí tanto en el mundo de las ideas, los pensamientos, las emociones y sentimientos, que cada vez deseaba saber más. De hecho, la psicología me ayudó tanto a salir de agujeros negros en los que me metía yo solita durante los años de Pandemia (más segunda maternidad) que le estaré eternamente agradecida. Por ello, por honrarla y por aprender más y más (mi sed de conocimiento es insaciable) me apunté a la carrera. Sí, como si a mi vida le sobrara tiempo, comienzo este año una segunda carrera universitaria. No tengo prisa. Lo hago por deseo y quiero disfrutar aprendiendo.
Mi tentativa del inconsciente para resolver un conflicto
Volviendo al sueño de la pelirroja o falsa yo, me di cuenta que es el reflejo de esa nueva yo que quiero ser (a lo mejor hasta me tiño el pelo de rojo). La parte del aneurisma y de que a esa nueva yo no le salieran las palabras me hizo pensar que tiene que ver con el miedo. Miedo a cambiar, a ser una persona diferente a la que soy. También pensé en el miedo a que no me salgan las palabras al hablar, al escribir, porque mi pasión es comunicar, compartir, transmitir. En el fondo, son dos miedos relacionados. La nueva yo no es tan distinta a la que fui o a la que un día deseaba ser. La persona en la que me he convertido quiere comunicar igual que lo deseaba la que estudió y terminó la carrera de Periodismo hace más de una década. Esta que soy hoy tiene miedo de ser juzgada por el otro, los otros, y aún así, quiere ser.
Ese es, según mi análisis, el significado de mi sueño, tan relevante en este momento de mi vida. Para poder entenderlo, me ha sido preciso deconstruirlo, mirarlo desde distintos prismas, comentarlo con mi terapeuta, ver otros ángulos y verme espejada. Ahora, te toca a ti tomar nota de ese sueño que has tenido, recurrente o no, y desmenuzar, manosear y repensar su significado.
¿Me lo cuentas en comentarios?